Acercarse a la Cala Ferrís, en la playa de los Náufragos de Torrevieja, puede provocar picores, mucosidades, toses y hasta dermatitis. Los vecinos del barrio de San Roque sospechan que las aguas fecales que llegan al mar por la insuficiente capacidad de la depuradora son la causa de sus dolencias. Para enfermar no hace falta bañarse, basta con aproximarse a las aguas contaminadas. Por la noche cierran las ventanas porque prefieren el calor al hedor de los vertidos. "Es insoportable", se quejó ayer Otilia Hernández, una de las afectadas. El problema se repite desde hace seis veranos, "pero ahora es más alarmante" porque llevan "ocho días seguidos aguantándolo", advirtió Pedro Martínez. El pasado fin de semana, su hijo mayor lo visitó con su familia. Al cabo de unas horas, notaron picores en la garganta y los ojos. "No paraban de toser y de llorar. En cuanto salieron de vuelta a Murcia, se pusieron bien", dijo.
Sigue leyendo en El País
No hay comentarios:
Publicar un comentario