Los residuos, y concretamente los vertederos de Les Coves de Vinromà, Fanzara y Salzedella, centraron ayer el pleno de la Diputación de Castellón, donde el enfrentamiento de los tres partidos con representación, PP, PSPV y Bloc, fue evidente. El cruce de acusaciones inundó el debate originado en una moción del Bloc, en la que solicitaba que el pleno de la Diputación manifestara su oposición a la creación de vertederos de residuos tóxicos y peligrosos en los tres municipios citados. Además, la propuesta pretendía que la Corporación provincial solicitara a la Generalitat que, "visto el fracaso del pacto de residuos", habilitara los órganos de participación social y política necesarios para llegar al consenso y "definir el modelo de tratamiento de los residuos, así como su ubicación atendiendo criterios predominantemente técnicos". Sin embargo, el PP se negó a votar esta moción y a reconocer el fracaso del pacto que el PSPV dio por roto tras las decisiones unilaterales adoptadas por el Consell y algunos de sus alcaldes para la ubicación de vertederos y plantas de tratamientos. Así, los populares presentaron una contramoción que excluye la oposición al vertedero de Fanzara y "anima" a la Generalitat a "seguir adelante con el pacto de residuos", a la vez que "invita" a todos los grupos políticos a buscar el consenso en las instalaciones. Finalmente, el pleno aprobó el texto con los únicos votos del PP.
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