El colectivo El Runar alertó ayer de que «gente con intereses urbanísticos» está presionando a los propietarios en la partida de Pinos para que firmen en contra de la declaración de paisaje protegido de la sierra de Bèrnia y Ferrer, en este caso en la zona que afecta al término municipal de Benissa. Los ecologistas aseguraron en este sentido que la figura proteccionista promovida por el Consell e impulsada por el Ayuntamiento de Benissa no implica una modificación del planeamiento existente y que además «en donde ahora se puede construir con 10.000 metros cuadrados después se seguirá pudiendo edificar».
Desde El Runar alertaron que «se está efectuando una campaña de intoxicación contra la declaración de paisaje protegido por parte de ciertos sectores con oscuros intereses en Pinos». El espacio que abarca la zona protegida es de 1.403 hectáreas de las cuales partes están en los municipios de Benissa y Xaló. Así, los conservacionistas instaron a los propietarios de la partida Pinos a que «se reúnan ellos y decidan lo que quieren pero que no se dejen llevar por la opinión de gente con intereses».
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